Libro de Efesios Introducción 1 2 3 4 5 6	Lección 1: Para el 1 de julio de 2023 PABLO Y LOS EFESIOS Sábado 24 de junio	ESTUDIOS DIARIOS SÁBADO DOMINGO LUNES MARTES MIÉRCOLES JUEVES VIERNES

Leer para el estudio de esta semana : Hechos 18:18–21; 19:13–20:1; 20:17–38; Efesios 1:1, 2; 6:21–24; 3:13; 1:9, 10. .

PARA MEMORIZAR:
“Y nos dio a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, que se había propuesto en Cristo, para que, llegado el tiempo, reuniera en él, bajo una sola cabeza, todo lo que está en el Cielo y lo que está en la tierra” (Efesios 1 : 9, 10, NVI ).

Cuando escribimos algo, tenemos un propósito para hacerlo, a veces de peso. Abraham Lincoln, por ejemplo, escribió su famoso discurso de Gettysburg en 1863 después de la terrible devastación de la batalla de la Guerra Civil estadounidense allí, que dejó unos siete mil soldados muertos. En ese discurso, invocando a los padres fundadores, Lincoln expresó su creencia de que la Guerra Civil fue la prueba definitiva para saber si la nación creada en 1776 perduraría o “perecería de la tierra”
Pablo tiene un propósito profundo que motiva su carta. En parte debido a su encarcelamiento ( Efesios 3:13, Efesios 6:20 ), y en parte debido a la continua persecución y tentaciones, los efesios se ven tentados a desanimarse. Pablo les recuerda lo que sucedió cuando se convirtieron, aceptaron a Cristo como su Salvador y se convirtieron en parte de la iglesia. Se han convertido en el cuerpo de Cristo ( Efesios 1:19-23, Efesios 4:1-16 ), los materiales de construcción de un templo 19-22, la novia de Cristo ( Efesios 5:21- 33 ), y un ejército bien equipado ( Ef. 6:10-20 ). Juegan un papel estratégico en el cumplimiento del gran plan de Dios, para unir todo en Cristo (Ef. 1:9, 10).). Pablo escribe para despertar a los creyentes de Éfeso a su plena identidad y privilegios como seguidores de Cristo.

Notas complementarias de EGW

Pablo fue un ejemplo vivo de lo que todo verdadero cristiano debe ser. Vivió para la gloria de Dios. Sus palabras resuenan en la línea de nuestro tiempo: “Porque para mí el vivir es Cristo”. “Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.” El que una vez fue perseguidor de Cristo en la persona de sus santos, ahora sostiene ante el mundo la cruz de Cristo. El corazón de Pablo ardía de amor por las almas y entregó todas sus energías para la conversión de los hombres. Nunca vivió un trabajador más abnegado, ferviente y perseverante. Su vida era Cristo; hizo las obras de Cristo. Todas las bendiciones que recibió fueron apreciadas como muchas ventajas para ser usadas para bendecir a otros.—Comentarios de Elena G. de White, en The Seventh-day Adventist Bible Commentary, vol. 6, pág. 1112.
En el concilio de los cielos, se hizo provisión para que los hombres, aunque transgresores, no perecieran por su desobediencia, sino que, mediante la fe en Cristo como su sustituto y garantía, pudieran llegar a ser los elegidos de Dios, predestinados para ser adoptados como hijos por Jesucristo. a sí mismo según el beneplácito de su voluntad. Dios quiere que todos los hombres se salven; porque se ha hecho amplia provisión al dar a su Hijo unigénito para pagar el rescate del hombre. Los que perecen, perecerán porque rehúsan ser adoptados como hijos de Dios por medio de Cristo Jesús. Antes de que se pusieran los cimientos de la tierra, se hizo el pacto de que todos los que fueran obedientes, todos los que por la abundante gracia provista llegaran a ser santos en carácter y sin mancha ante Dios al apropiarse de esa gracia, serían hijos de Dios. Este pacto, hecho desde la eternidad, fue dado a Abraham mil novecientos años antes de la venida de Cristo. ¿Con qué interés y con qué intensidad estudió Cristo en la humanidad a la raza humana para ver si se beneficiarían de la provisión ofrecida?—Comentarios de Elena G. de White, en The Seventh-day Adventist Bible Commentary, vol. 6, pág. 1114.
Todos los favores que Él ha mostrado a Su Hijo al aceptar la gran expiación, se muestran a Su pueblo. Los que han unido sus intereses en el amor con Cristo son aceptos en el Amado. Sufrieron con Cristo en su más profunda humillación, y su glorificación les interesa mucho, porque en él son aceptos. Dios los ama como ama a su Hijo. Cristo, Emanuel, se interpone entre Dios y el creyente, revelando la gloria de Dios a sus escogidos y cubriendo sus defectos y transgresiones con las vestiduras de su propia justicia inmaculada.—Comentarios de Elena G. de White, en La Biblia Adventista del Séptimo Día. Comentario, vol. 6, pág. 1115.

• Siguiente >